En el corazón de Guadalajara, un espacio ha resistido el paso del tiempo, las modas y los cambios vertiginosos de la industria musical. Foro Independencia celebra 10 años de ser un refugio para el rock, la autenticidad y la diversidad artística. En esta entrevista especial con Jesús Weeks, el alma detrás del foro, exploramos la historia, los retos y los sueños que han convertido a este lugar en una leyenda viva de la escena independiente.
Pasión, casualidad y una bodega olvidada: el origen del Foro Independencia
David: Weeks, ¿qué te llevó a crear el Foro Independencia? ¿Fue pasión, casualidad o pura necesidad de llenar un vacío en la escena?
Weeks: Todo fue por pasión y un poco de casualidad. Desde los 15 años estuve en bandas, siempre me fascinó lo que pasaba detrás del escenario, esa conexión única. Aunque trabajé mucho tiempo en el fútbol, la música siempre fue mi espinita. La bodega donde está el Foro era de mi abuelo y llevaba 10 años clausurada. Un día me llaman para decirme, La bodega de Epigmenio la han liberado, yo sin chamba y sin plan, fui a verla. Abrimos la puerta y sentí que ahí había algo especial. Empezamos a remodelar sin saber en lo que nos metíamos. La inversión se disparó, pero decidimos seguir adelante. Diez años después, aquí seguimos rockeando.
La primera noche del Foro Independencia: una mezcla de nervios, amigos y punk rock
David: ¿Cómo fue la primera vez que llenaron el Foro? ¿Recuerdas la energía de esa noche inaugural?
Weeks: La primera noche oficial fue pura emoción y nervios. Antes de abrir, hicimos dos shows de prueba con Arcadia Libre y La Mugrosa Ska, solo para checar la operación y el equipo. Pero la noche inaugural estuvo encabezada por Garigoles, una banda mítica de Guadalajara que siempre admiré. Invité a Jobo Panteras, quien es ahora un buen amigo, y ellos se convirtieron en nuestros padrinos. Desde entonces, tocan una o dos veces al año en el foro; son de casa.
Esa noche, en septiembre de 2014, no fue un lleno total, pero la vibra fue increíble. Tocaron puros amigos y la gente conectó. Era un lugar nuevo, pero sentíamos que algo bueno se estaba cocinando. Un mes después, tuvimos a nuestra primera banda internacional: Biohazard. Ahí fue cuando todo empezó a moverse rápido, llegaron promotores y el foro comenzó a crecer. Desde entonces hemos mejorado todo: la operación, la experiencia y el servicio. La meta siempre ha sido esa: crecer y ofrecer lo mejor para la escena.
Foro Independencia: un nombre sencillo con mucho peso
David: ¿Por qué el nombre Foro Independencia?
Weeks: Fue algo muy básico. Estábamos en una lluvia de ideas con mi socio de entonces (que solo estuvo seis meses), y como el lugar está a una cuadra de la Calzada Independencia, se nos hizo natural. En ese tiempo la palabra foro no se usaba tanto, así que también tenía un toque fresco.
El logo tiene una historia chida: es un ángel de la Independencia y lo diseñó Beto, trombonista de No Tiene La Vaca, una banda en la que toqué y de la que fui manager. Beto es un gran diseñador y cuando le platiqué del proyecto, se aventó el logo. Todo fluyó sin complicaciones. A veces, las mejores cosas llegan así, sin pensarlas tanto, solo hay que saber escucharlas y seguir el camino.
Rock and roll y cuentas claras: los retos del arranque
David: ¿Qué desafíos enfrentaron en esos primeros años?
Weeks: ¡Uf! Aprender a operar todo como un negocio fue clave. De repente tienes empleados, nóminas que pagar, renta, luz, permisos… No es solo decir: “Vamos a hacerlo y a ver qué pasa”. Es buscar la perfección en el caos del rock and roll, especialmente siendo independientes.
Todo cuesta lana. Desde el principio, nos clavamos en dar un buen servicio y eso implica estar siempre mejorando: micrófonos, equipo, lo que haga falta. Sabemos que pueden ocurrir malas experiencias, pero la idea es tratar bien a todos: promotores, bandas y público. Queremos que se sientan libres y bienvenidos.
Pero lo más importante ha sido tener cuentas claras. Una buena administración es la base de todo. Si no controlas eso, el dinero se va como agua. Afortunadamente desde el día uno, nos hemos enfocado en mantener las cosas bien manejadas.
Libertad, respeto y rock and roll: la esencia del Foro Independencia
David: ¿Cómo describirías la atmósfera y la “personalidad” del lugar? ¿Qué lo hace único en comparación con otros sitios?
Jesús Weeks: Creo que la atmósfera del Foro es pura libertad. Es un espacio independiente donde la banda viene a pasársela bien, sin importar si llegan solos o acompañados. Muchos vienen porque saben que aquí se van a encontrar a alguien conocido o a algún viejo amigo. Es un lugar donde puedes venir en bicicleta o con tu perro, aunque mejor no traigan a sus perros por el ruido pobrecitos, pero bueno la idea es que todos se sientan libres.
Aquí no hay consignas de vestimenta ni etiquetas. Creemos en la igualdad, el respeto, la tolerancia y la diversidad. Eso es fundamental y la gente lo ha entendido bien. Nunca hemos tenido problemas graves, la banda cuida el lugar dentro del caos y el desmadre. Claro, alguna bronca entre borrachos puede pasar, pero es rarísimo.
Las mujeres pueden sentirse seguras y respetadas y los hombres saben que pueden pasarla bien, pero nadie se pasa de lanza. Es un sentimiento de comunidad que ofrece el Foro Independencia. Es un negocio, sí, pero también un centro cultural con reglas claras. Cerramos a la hora que debemos, cumplimos con todo, pero ese sentido de identidad y unidad es algo que le hacía falta al rock and roll de Guadalajara hace diez años. Y aquí está.
El arco de la historia: identidad y evolución en el Foro Independencia
David: ¿Hay alguna característica arquitectónica o de diseño que tenga un significado especial en el foro?
Weeks: Sí, la terraza tiene un arco de cantera con mucha historia. Se dice que el barrio Mexicaltzingo, uno de los más antiguos de Guadalajara, era un punto de descanso para viajeros que iban al sur, hacia Vallarta. Se cree que este lugar era uno de esos paraderos, donde la gente llegaba con sus mulas o caballos a descansar. Ese arco tiene años de historia y es parte de la identidad del foro.
Dentro del foro hay otros arcos más recientes que no me encantan; siento que afectan un poco la vista. Algún día me gustaría quitarlos, levantar el techo y mejorar el diseño. Pero siendo independientes, hay que priorizar. Preferimos invertir en mejor audio y experiencia para la banda. Así empezamos y por ahora, los arcos se quedan como parte del viaje.
Un coctel de subculturas y sonidos: la diversidad musical del Foro Independencia
David: ¿Qué tipo de música, géneros y subculturas se encuentran más en el Foro?
Weeks: Sin duda, el punk rock es lo que más vibra aquí. También el ska, aunque está algo a la baja últimamente. El hip hop ha crecido muchísimo y el metal… uff, el metal siempre ha estado fuerte y no solo aquí, ¡en todo el país!
El indie también tiene su espacio, aunque siento que parte del público de ese género todavía se la piensa para venir al centro. Muchos buscan otras zonas, pero nosotros abrimos las puertas a todos. Hemos tenido desde bandas de black metal satánico hasta rock cristiano.
Eso sí, hay reglas claras: aquí no hay espacio para la homofobia, racismo o xenofobia. Hemos tenido que cancelar shows al enterarnos de bandas que no cumplen con esos valores. No podemos investigar la vida de cada músico, pero si nos damos cuenta de algo así, actuamos.
El público que más nos sigue es el metalero, aunque el hip hop también tiene mucha presencia. El hardcore tuvo su momento fuerte y todavía viene banda a esos shows. Al final, este es un espacio abierto para todas las subculturas. Aquí todos son bienvenidos, mientras respeten la libertad y la dignidad de los demás.
Momentos inolvidables: Los conciertos que marcaron historia en el Foro Independencia
David: ¿Cuál ha sido el concierto más perro que han tenido aquí? Algo que ni tú te esperabas y dejó a todos hablando. ¿Algún evento que recuerdes como un antes y un después?
Jesús Weeks: ¡Uf! Ha habido varios dependiendo del género. Pero tener a Chicano Batman aquí fue algo increíble. Era su primer show en Guadalajara, y el lugar estaba a reventar. Me dejó una gran enseñanza, no solo por la banda, sino por su ingeniero de sonido. Este tipo, que trabaja en la producción del Coachella, nos dio muchos tips sobre cómo mejorar. Me dijo cosas como: “Oye, puedes ajustar esto, mejorar aquello”.
Eso me marcó porque siempre estoy abierto a la crítica constructiva. Nos gusta escuchar al público, saber qué funciona y qué no. A veces cuesta porque todo implica lana, pero somos independientes y vamos mejorando paso a paso.
Otro concierto inolvidable fue el de Fermín Muguruza. Vino a presentar su película y se armó un show con Cabrito Vudú como su backing band. Fermín cantó durante hora y media, ¡fue épico! Además, tuve la oportunidad de subirme a tocar con él. Es uno de mis ídolos, y compartir escenario con él fue algo fuera de serie.
También hemos tenido shows brutales con bandas como Dubioza Kolektiv. ¡En vivo son una locura! O Sekta Core, que siempre prende a la banda. Y cómo olvidar cuando tocó Armando Palomas. Ese día se le murió su mamá, pero aún así se aventó tres horas y media de concierto.
Cada show deja algo, ya sea energía, una lección o un recuerdo que te marca. A veces no son los más taquilleros, pero sí los más significativos. Aquí hemos vivido momentos que, como dices, marcan un antes y un después.
Resiliencia y supervivencia: La década del Foro Independencia
David: ¿Alguna vez pensaste que el Foro iba a durar una década? ¿O hubo momentos en los que pensaste en tirar la toalla?
Weeks: ¡Tirar la toalla, nunca! Siempre quise que durara. Pero sí hubo un momento durísimo: la pandemia. Estuvimos a punto de cerrar. Para sobrevivir, tuvimos que hacer malabares, empeñar equipo, sacarlo, volver a meterlo… todo para pagar sueldos. Fue un ciclo complicado.
Además, en ese tiempo también nos robaron equipo del anexo. No solo era perder lo nuestro, sino también cosas que no eran del Foro. Fue un golpe brutal. Pero, como dicen, nos aferramos. Dijimos: “¡Esto no se acaba aquí!”.
Hubo recortes, claro. Solo se fue una persona, pero los demás aguantamos. No veníamos a trabajar; les decía: “Esto es lo que hay”. Y cuando parecía que no lo íbamos a lograr, ahí estuvimos, resistiendo.
No fue fácil: vendimos comida desde mi casa, entregábamos a domicilio… lo que fuera necesario para sobrevivir. No me da vergüenza decirlo. La vida te pone a prueba y uno hace lo que sea por mantenerse de pie.
Aguantamos porque creemos en esto. El Foro no es solo un negocio, es nuestra casa. Pasamos por pérdidas, momentos horribles, pero aquí estamos. Y lo logramos. 💪
Anécdotas del Foro: Magia negra y rockstars transformados
David: Sabemos que hacen eventos locales e internacionales. ¿Algún músico o banda local o internacional los sorprendió con una anécdota particular?
Weeks: ¡Sí! Hay muchas. Pero una que siempre recuerdo es la clásica de los black metaleros. Una vez, cuando vino Mayhem, nos sacaron a todos del camerino porque iban a hacer un ritual de magia negra. ¡Imagínate! Ponen un pentagrama, sacan un libro negro… y ahí nos tienes a todos afuera, sacadísimos de onda.
Lo más gracioso es que, fuera de esa pose oscura, son súper tranquilos. Llegan, te saludan, cuelgan su ropa de cuero y todo bien. Pero cuando se transforman —con el maquillaje y la ropa de escenario— parecen otras personas. Y cuando termina el show: “¡Muchas gracias!” (risas). Es como si fueran dos personas distintas. ¡Son muy graciosos!
Claro, también hay momentos tensos. Hemos tenido casos donde algún músico o parte del crew se quiere pasar de lanza, tratando mal a alguien. Y ahí sí: no se tolera. Les decimos: “Aquí te comportas o te largas”. Este espacio es para todos, pero el respeto es primero.
En general, la vibra ha sido positiva. Siempre hay estrés, claro. En este trabajo, los fierros fallan, las cosas pueden salir mal… siempre estás en la cuerda floja. Pero con el tiempo, he aprendido a relajarme más. Es parte del rock, ¿no?
El legado del Foro Independencia en Guadalajara
David: ¿Qué representa el Foro Independencia para la escena rockera de Guadalajara? ¿Cómo sientes que ha impactado en la vida de las bandas locales? ¿Has visto cambiar la comunidad estos diez años?
Weeks: Sin duda, creo que hemos tenido un impacto positivo. La gente lo reconoce, lo quiere, lo estima. Claro, habrá quienes no, pero eso es normal. Lo importante es que hemos dejado una huella.
El Foro ha sido ese espacio que muchos necesitaban. Aquí, bandas que no podrían tocar en otros lugares han encontrado su hogar. Es un sitio donde puedes descubrir a tus bandas favoritas en vivo. Imagínate, Lendakaris Muertos de Pamplona tocando aquí… ¡¿cuándo ibas a pensar que eso pasaría en Guadalajara?!
Nos hemos dedicado a abrir puertas a sonidos y proyectos que otros han cerrado. Por eso, escuchar a la gente compararnos con el legendario Roxy es un halago enorme. Aunque no me corresponde a mí decirlo, es lindo cuando te dicen que el Foro ya es un lugar histórico, parte de la memoria rockera de esta ciudad.
Si seguimos diez años más o si cerramos mañana, creo que ya hemos dejado un legado. La gente recordará que existió un lugar llamado Foro Independencia, donde la música y la comunidad encontraron su espacio. Ese era el objetivo: crear algo que trascendiera, y aquí estamos, dejando esa marca.
La comunidad del Foro: Más que público, una familia
David: ¿Cómo es la relación entre ustedes y la comunidad que asiste? ¿Es un público recurrente o siempre hay caras nuevas?
Weeks: Es muy recurrente, la verdad. Ya hay muchos que ves tan seguido que terminan siendo hasta compas. Se crea un vínculo especial con la gente que viene seguido, sobre todo dependiendo del género.
Por ejemplo, hace poco tuvimos un show de K-pop y fue toda una experiencia nueva. La mayoría eran chicas, y ese público vive los conciertos de una forma distinta. ¡Desde las 10 de la mañana ya estaban formadas! Es otro rollo, pero lo respetamos. Solo les pedimos que se cuiden, que pasen al baño y que coman algo para que no se desmayen.
Pero en la mayoría de los shows, siempre hay caras conocidas. La gente que asiste regularmente ya sabe qué esperar y hasta recomienda eventos de boca en boca. Se ha formado una verdadera comunidad. Los mismos que vienen seguido son los que están al tanto de la cartelera y le dicen a otros qué show habrá.
Así que sí, más que público, esto se ha convertido en una familia rockera.
Mantener vivo el rock: ¿Responsabilidad o evolución?
David: ¿Has sentido alguna presión o desafío por mantener vivo el espíritu del rock o sus variantes en un mundo que a veces parece preferir otros géneros?
Weeks: Presión como tal, no. Al final del día, soy un venue y puedo tener desde pop hasta lo más extremo del rock. Creo que la verdadera presión está en los artistas, en las bandas. Ellos son los creadores, los que llevan la bandera del género. Mi papel es más bien crear experiencias y apoyar para que su arte brille. Que el sonido sea el mejor, que la producción esté a la altura.
El rock nunca va a morir, eso lo tengo claro. Pasa por etapas, sí, pero siempre estará ahí. Siempre habrá headliners en festivales, siempre habrá bandas emergiendo y creciendo. Aquí, por ejemplo, hemos visto gente como Nampa Básico tocar un par de veces y luego dar el salto al Auditorio Telmex. ¡Eso es lo más chido! Ver cómo crecen, cómo llegan lejos.
También pasa con el staff. Muchos empiezan aquí, aprenden y después andan girando con bandas enormes. El Foro Independencia es como una especie de escuela del under. Queremos que todos aprendan, crezcan y si ya no regresan porque la rompen, ¡pues qué mejor!
No me siento responsable de “mantener vivo el rock”. Mi responsabilidad es ofrecer un espacio digno para que todo esto suceda. Si viene alguien de pop, también es bienvenido. Esto no es de excluir géneros; es de crear un lugar donde todo pueda pasar. Al final, los que mantienen vivo el rock son las bandas, los que ensayan día a día. Nosotros solo somos el vehículo para que se expresen.
Un espacio digno y auténtico: la evolución del Foro Independencia
David: ¿Cómo ha cambiado el Foro desde que abrieron? ¿Qué cosas se mantienen igual y qué ha evolucionado?
Weeks: ¡Todo ha cambiado! Tal vez lo único que se mantiene intacto es el escenario—su tamaño y las luces que colgamos desde el inicio. Pero fuera de eso, hemos renovado prácticamente todo:
Los baños cambiaron de lugar, la iluminación fue actualizada y mejorada, el audio renovamos el sistema por completo, el piso recientemente fue remodelado para mejorar la experiencia del público, camerinos ahora tenemos tres, el patio, lo hemos ido arreglando para ofrecer un espacio más cómodo. Realmente todo ha ido evolucionando
Incluso el anexo ha evolucionado: le pusimos tela y seguimos trabajando para mejorarlo. Siempre estamos cambiando algo. Si alguien deja de venir unos meses y regresa, seguro notará algo nuevo.
Esta constante renovación no es solo por gusto, sino por necesidad. La industria te lo exige. Si te estancas, dejas de ser competitivo. Hay que estar actualizado para brindar la mejor experiencia posible. Es un proceso continuo, un compromiso con el crecimiento y la calidad. Así es este mundo: o te adaptas, o te quedas atrás.
Proyectos futuros y sueños en el Foro Independencia
David: ¿Tienen algún proyecto o cambio a futuro? ¿Algún sueño o meta que no hayan cumplido aún?
Weeks: ¡Sí, claro! Hay varios planes en puerta. Uno de los proyectos más importantes es renovar el techo del foro. Queremos aumentar la altura del escenario para mejorar la iluminación y darle un toque más impactante. Ya instalamos una pantalla recientemente, pero siempre buscamos crecer más.
También queremos seguir invirtiendo en mejoras técnicas: Mejores bocinas, Nuevos micrófonos, Optimizar el sonido e iluminación.
Otro sueño en proceso es abrir un restaurante-bar, pero con un enfoque muy especial. La idea es crear un mini-venue para unas 80 personas. Sería un espacio más íntimo, ideal para bandas under que apenas comienzan. Ahí podrían ofrecer shows más pequeños y auténticos, acompañados de buena comida y un buen chupe.
A largo plazo, ¡mi sueño personal es retirarme en la montaña! Imagino estar ahí con mi esposa y mis perros, mientras mi hijo crece y sigue su camino. Pero, por ahora, la meta es que el Foro siga siendo un lugar vibrante para la escena, siempre en evolución.
Foro Independencia en tres palabras y su futuro
David: Si tuvieras que resumir al Foro en tres palabras, Jesús, ¿cuáles serían? Sabemos que cada una lleva mucha historia detrás. ¿Y cómo imaginas el lugar en otros 10 años?
Weeks: ¡Uf, qué difícil! Pero creo que las tres palabras serían:
Digno: Es un lugar digno para la industria musical. Ofrecemos a las bandas y al público un espacio que respeta y eleva la experiencia del rock, tanto en producción como en trato. Auténtico: El Foro tiene una personalidad única. No nos parecemos a ningún otro lugar; aquí cada show tiene su propia esencia. Acogedor: Siempre buscamos recibir bien a todos, ya sean bandas emergentes, consagradas o público. Es un espacio donde la comunidad se siente en casa.
¿El futuro del Foro en 10 años? Lo imagino más reforzado, con muchísimo trabajo detrás. Aún no hemos llegado ni al 50% de lo que visualizo. Hay muchas mejoras pendientes que sé que vamos a lograr.
Quiero que se mantenga como un espacio sólido, en constante evolución. Si todo sigue su curso, veremos un Foro más fuerte, con mejor tecnología y cada vez más consolidado en la historia del rock en Guadalajara.
Vivir del rock: pasión, hermandad y filosofía de vida según Jesús Weeks
David: ¿Qué significa para ti el rock? ¿Es una filosofía de vida, una manera de vivir, o algo que corre en tu sangre?
Jesús Weeks: La verdad, nunca me he considerado un rockero en el sentido clásico. No soy un “chavo de onda”, como dirían algunos. Lo que más me ha marcado es la hermandad que gira alrededor del rock. Gracias a la música, he conocido a mis mejores amigos, a mi esposa y he vivido las mejores experiencias de mi vida.
Me siento afortunado. No soy músico, pero vivo de la música y eso es algo que no todos pueden decir. Hay mucha presión, mucha habladuría, pero no me importa. Este camino me ha enseñado mucho. Y si tuviera que agradecerle a alguien del rock, sería a Joe Strummer. Él expresó muchas verdades esenciales que van más allá de la música misma.
El ambiente puede ser pesado, con energías positivas y negativas, confrontaciones, celos… Pero a mis 45 años y después de pasar por tres operaciones, aprendí a enfocarme en lo mío. Tengo una ideología clara sobre cómo vivir y actuar. Me guste o no, no me muevo de ahí.
Estoy agradecido con la vida por permitirme decir que vivo del rock. Es estresante, sí, pero también es un privilegio. Vivir del rock es un regalo, y lo valoro cada día.
Mantener viva la esencia rockera en tiempos de cambio
David: ¿Cómo mantienen viva la esencia rockera en un mundo donde otros géneros a veces toman la escena?
Weeks: La clave está en la libertad y la apertura a todas las corrientes. Esa es la mejor manera de aportar a la cultura y al arte: dando espacio a todas las expresiones artísticas. Guadalajara es una ciudad enorme, una metrópoli con oportunidades para todos. Por eso, deben existir lugares que abracen esa diversidad.
En el Foro, practicamos lo que predicamos: igualdad y diversidad. Mientras todo se haga con respeto, siempre tendrán cabida aquí. La esencia rockera no es solo un género, es una actitud, un compromiso con la autenticidad. No se trata de “escupir por escupir”, sino de ser conscientes de lo que representamos y defender nuestras ideas hasta el final.
¿Nunca has pisado el Foro? Esto es lo que te estás perdiendo
David: ¿Qué le dirías a las personas que nunca han pisado el foro?
Weeks: ¡Te estás perdiendo de vivir noches increíbles! Aquí no importa cómo vengas: en chanclas, con jeans rotos o de gala. La vibra del Foro es pura hermandad. Es un lugar donde puedes ser tú mismo y pasar algunas de las mejores noches de tu vida.
Aquí han nacido historias inolvidables: bodas, amistades eternas, incluso personas que han encontrado el amor de su vida. Y todo mientras disfrutas de tu banda favorita, rodeado de amigos.
A veces, esa noche especial llega cuando menos lo esperas, incluso si solo hay 50 personas. Lo importante es la experiencia: sentir la música, crear recuerdos que nunca olvidarás.
Nosotros ponemos el espacio, la buena vibra y el mejor sonido. Tú decides cómo vivirlo. ¡Aquí no te vamos a estar chingando!
Si el Foro Independencia fuera una banda, ¿cuál sería?
Jesús Weeks: Uff, difícil de elegir. En cuestión de sonidos, el Foro tiene muchas caras, pero si tuviéramos que ser una banda, seríamos The Clash. También podría ser Mano Negra o Todos Tus Muertos.
¿Por qué? Porque esas bandas representan lo que somos: rebeldes, auténticos, eclécticos y siempre del lado de la diversidad. Mezclamos estilos, rompemos barreras y sobre todo, nunca perdemos la esencia.
¡Somos pura resistencia y pasión!
Por último, Weeks, dinos: ¿Qué es lo que más amas de este lugar? ¿Qué te mantiene aquí cada día?
Weeks: Lo que más amo del Foro es que aquí creas lazos y generas felicidad. En un mundo tan caótico, la música me salvó de todo y me dio lo mejor de mi vida. Si puedo aportar aunque sea un poco para que la gente tenga noches increíbles y experiencias que se lleven para siempre, con eso me doy por satisfecho.
Este lugar demuestra que puedes ser alternativo, que puedes amar la música más rarita del mundo y vivir de ello. No tienes que irte al mainstream para sentirte realizado.
Diez años de rock, hermandad y resistencia no son cualquier cosa. El Foro Independencia no solo ha sobrevivido, ha evolucionado y se ha transformado en un hogar para artistas, bandas y fans que buscan más que solo un concierto: buscan una experiencia. Weeks y su equipo han demostrado que el rock sigue más vivo que nunca.
Gracias por acompañarnos en este viaje por la historia del Foro. Si te gustó esta entrevista, no te pierdas nuestros próximos artículos, donde seguiremos explorando los rincones más auténticos de la escena independiente. ¡El rock nunca descansa y nosotros tampoco!
Este lugar lo he considerado mi escuela, mi casa y mi refugio. Larga vida a el foro y toda las vidas que trabajan para que el siga vivo, el staff, administración y artistas!!!!